Los exponentes de la cumbia peruana se empiezan a extrañar en medio de una crisis sanitaria que ha golpeado fuertemente la economía de los peruanos, también ha perjudicado el bolsillo de miles de artistas que no tienen cómo mantener a sus familias tras la llegada de la pandemia del coronavirus, en la que se suspendieron todos los eventos sociales que generen aglomeraciones.
Los artistas musicales aseguran que el prestigio no tiene precio y no pueden hacer un concierto y brindar un mal servicio, ya que la alternativa virtual para llegar al público no es la apropiada porque el Internet se cuelga y prefieren evitar reclamos de parte de su audiencia. Además, Algunos artistas ya realizaron presentaciones virtuales y aseguran que no resultó como se esperaba, no se compara a los del Huaralino u otros locales en los que el aforo superaba las 10 mil personas.
Dentro de cada agrupación musical hay un equipo de trabajo, entre ellos sonidistas, miembros de producción, personal del área de marketing, administradores, contadores, asistentes y un largo etcétera ya que desde hace casi 50 años se realizan eventos de este tipo en todo el Perú.