A través de la gerencia de Salud, Bienestar y Deportes, el municipio de San Isidro emitió pronunciamiento tras el borrado de un mural realizado por la comunidad shipibo-conibo de Cantagallo, durante la anterior gestión en la fachada de la Casa de Encuentro Vecinal de Santa Cruz, cuyas instalaciones venían siendo alquiladas.
"El contrato venció hace un par de días porque el local era alquilado. Lo que hemos hecho es entregar el local el día 16 de junio temprano como a las 8 de la mañana, entonces el local ha sido entregado. En una de las cláusulas indica que teníamos que entregarlo tal cual nos lo habían entregado en aquella vez", señalaron.
Sin embargo, este accionar de la comuna distrital ha generado la indignación de los vecinos de la zona y del anterior alcalde, Manuel Velarde, quien catalogó a su sucesor de racista.
"Si al alcalde le queda un poco de sangre en la cara lo que corresponde es renunciar porque no podemos tener una autoridad en pleno siglo XXI, a puertas del bicentenario que promueva actos racistas y en contra de nuestra identidad nacional. Cáceres debe renunciar inmediatamente", sostuvo.
Cabe mencionar que esta no es la primera vez que el burgomaestre Augusto Cáceres se ve inmerso en un caso polémico, pues fue criticado por la colocación de rejas en el Puente de la Amistad que une su jurisdicción con Miraflores, impidiendo el libre tránsito de vecinos y visitantes.