El último viernes, al interior de la clínica Nuevo Mundo en el distrito de Los Olivos, Mirko Manuel Callirgos Bozzo cometió un acto sucio y repudiable en plena pandemia del coronavirus: escupió en el rostro de una trabajadora que le explicaba que los servicios que requería tenían costos diferentes, y la ecografía que su pareja debía realizarse se debía pagar aparte y dicho costo no estaba incluido en la consulta.
En las redes sociales el sujeto tiene una apariencia que engaña a cualquiera. Sin embargo, las investigaciones demuestran que tiene una gran cantidad de denuncias: violencia psicológica, violencia física, faltas contra la persona, daño físico y psicológico, lesiones. Se trataría de un hombre con un común denominador: la violencia.
La abominable escena está tipificada como delito contra la salud pública. Según la agraviada, Mirko Manuel Callirgos Bozzo habría afirmado luego de escupirle que era portador del peligroso COVID-19. Por su parte, la Policía Nacional del Perú, está tras su búsqueda, sus redes sociales las ha cancelado y su celular lo apagó.