“Señor presidente hay un muerto, ¿qué está esperando que nos muramos todo? Somos 72 personas infectadas” estos eran los gritos desesperados de los reclusos desde los sótanos de la carceleta del Poder Judicial en la avenida Abancay, quienes temen por sus vidas ante el brote del coronavirus.
Los internos denuncian que han sido abandonados a su suerte junto a personas infectadas con el COVID-19. Mientas que, los familiares de los más de 70 internos alzaron sus voces y expresaron su preocupación ya que aseguran que varios reclusos presentan algunos síntomas graves del nuevo coronavirus.
Los reclusos contagiados habrían sido separados del resto de internos en una celda ubicada en el sótano de la sede del Ministerio Público.
Sin embargo, sus familiares siguen pidiendo apoyo a las autoridades para que los internos reciban atención médica y sean trasladados a otro espacio libre contagios.