Robos a mano armada, cogoteo, asalto al paso y demás invaden las calles del distrito de San Martín de Porres. Esta situación ha llevado al borde de la desesperación a los vecinos que no saben cómo enfrentar la delincuencia.
Los residentes han indicado que cuentan con cámaras de seguridad, una alarma, grupos de WhatsApp en los que se comunican sobre sospechosos, todo financiado por ellos mismos y, pese a todos sus esfuerzos, en lo que va del año han denunciado casi una veintena de robos.
El alcalde, Julio Chávez, sindicó como responsable a la Policía y aseguró que en su jurisdicción, de más de 400 mil habitantes, no hay suficientes efectivos policiales, ni equipamiento adecuado para hacer frente a la ola delictiva.
“Mientras sigamos teniendo comisarías desabastecidas desde el punto de vista de recursos humanos y logísticos, flaco favor le hacemos a la lucha contra la inseguridad ciudadana” y concluyó que “entre las tres comisarías que están dentro del distrito no llegamos a tener 300 efectivos policiales”.
