Un ciudadano que decidió grabar a dos policías indiferentes ante el caso de una joven de 22 años que fue agredida por su pareja en La Molina, viene recibiendo amenazas de llamadas anónimas con palabras de alto calibre.
"La chica gritaba y nadie decía nada, me comencé a inquietar, llamé a serenazgo pero no podía ingresar porque no había efectivo policial, llamé a la policía y no venía nadie", contó.
Alertado por el ciudadano, el suboficial a paso lento acudió al edificio. "La chica estaba llorando, qué pasa si la matan o estrangulan, ahora estaríamos velando", agregó el usuario denunciante, quien ahora se encuentra vulnerable con las llamadas amenazantes.