La vía peatonal construida cerca a la bajada Armendáriz prometía ser un paso seguro para que los peatones pudieran acceder a las playas, pero ahora se ha convertido en un verdadero peligro.
Esta vía presenta serias deficiencias como veredas en mal estado, falta de geomallas de seguridad y la cercanía con la pista. Los muros que deberían servir de sostén ante cualquier accidente, no tienen la altura suficiente, lo que genera gran desconfianza en los transeúntes.
Punto aparte es el tema de seguridad, pues los peatones aseguran que la iluminación en la vía es escasa y que solo está alumbrada la vía donde circulan los vehículos, además que no se ve patrullaje ni la presencia de serenazgo.
Ante esto, los vecinos esperan una pronta solución pues a puertas de iniciarse el verano, muchos temen que pueda ocurrir cualquier accidente.
