En el centro educativo Raúl Porras Barrenechea, ubicado en la calle 6 en Ate Vitarte, los escolares estudian de pie, encorvados y arrodillados porque en el colegio faltan sillas.
Para estudiar cómodos, los niños traen sus propias sillas desde sus casas o compiten por llegar más temprano al colegio para asegurarse un asiento. Lo más indignante es que a pesar de la falta de mobiliario, en la puerta del centro educativo colocan un cartel que anuncia que habrían hasta 38 vacantes disponibles.
Pero este no es el único reclamo que tienen los padres, al parecer, la gestión de la última directora habría construido nuevos servicios higiénicos los que mantienen cerrados con rejas y candados.
Al respecto, la directora en el centro educativo prefiere no responder a la prensa. Los padres de familia han acudido hasta la UGEL para denunciar lo que sucede pero no han recibido respuesta, ellos exigen un cambio de administración y nuevo mobiliario.
