El obrero Javier Rivera Miculicich contó con total sangre fría la forma en que asesinó a su esposa y a sus tres menores hijos de 2, 4 y 6 años. Bajo la consigna de “nos morimos, nos morimos todos” este sujeto acabó con la vida de todos los miembros de su familia y posteriormente intentó suicidarse.
Rivera Miculicich señaló que se encontraba furioso con la madre de sus hijos tras haber estado separados por un mes y en un ataque de ira cometió el horrendo crimen.
Según declararon las hermanas de la fallecida, durante seis años, Edith Huaylas de la Cruz habría callado las constantes agresiones físicas y verbales de su pareja. Ellas afirmaron que Huaylas de la Cruz ya no vivía con su esposo y que solo se había acercado ese día para cocinar.
Las hermanas también señalaron que el hombre había amenazado con quemar viva a la mujer y a sus hijos dentro de su casa en San Juan de Lurigancho.
Justo el 2 de noviembre, Edith Huaylas tenía planeado celebrar con su familia su cumpleaños número 29.