Los delincuentes ahora han tomado las barberías como blancos predilectos para cometer sus fechorías. Durante sus atracos no solo amedrentan y amenazan a sus víctimas sino que también los agreden físicamente.
Frente a esta ola de delincuencia que golpea a estos negocios, los propietarios han tenido que tomar sus propias medidas de seguridad, muchos de ellos trabajan prácticamente enjaulados pues se ven obligados a cerrar con rejas y candados para evitar robos.
En el distrito del Agustino, dos sujetos fueron capturados por agentes de la División de Investigación Criminal Centro. Se trata de Andrés Nonajulca Jiménez, de 23 años, y su medio hermano Giancarlo Canales Jiménez de 18.
Ambos son acusados de extorsionar al dueño de una barbería, exigiéndole un pago de 100 soles semanales, de no cumplir con este pago atentarían contra su vida.
Tras esta detención, la Policía había hallado un revolver con cinco cartuchos así como droga.
