Como se recuerda durante la jornada del último censo a nivel nacional, una empadronadora fue ultrajada sexualmente en el asentamiento humano “Edilberto Ramos” en el distrito de Villa El Salvador. La voluntaria fue atacada cuando terminó de tomar los datos para el censo por un hombre identificado como Marco Antonio Luza Segundo de 45 años quien forzó a la mujer y la encerró en su cuarto para abusar de ella. Tras denunciarlo el presunto violador fue detenido por agentes de la comisaría de Pachacámac. Han pasado cinco meses desde este lamentable incidente y su presunto agresor cumple seis meses de prisión preventiva en el penal Castro Castro mientras se realiza el proceso.
Hoy Jennifer Villena, la empadronadora ultrajada sigue viviendo un calvario, pues fue despedida del trabajo que le ofrecieron en el Centro Emergencia Mujer de Villa María del Triunfo luego de laborar apenas un mes. En los estudios de 24 Horas Mediodía manifestó que la despidieron de un momento a otro justificando que era por las constantes faltas a su centro de trabajo, ausencias justificadas ya que eran usadas para continuar con su proceso judicial por el ultraje que fue víctima. También denunció que ha sido desalojada de su vivienda y esto sucede a unos días que Villena indicó que las diligencias sobre su caso aún no avanzaban.
En otro momento también denunció que le pusieron una condición para darle el trabajo y era retirar la denuncia contra ellos por el amargo episodio vivido mientras realizaba su labor de empadronamiento durante el censo del 2017.
Hoy son muchas las promesas incumplidas y la ayuda no ha llegado como se lo ofrecieron pero lo que si hay que reconocer es la valentía de Jennifer, que ha sabido sobreponerse la dolor y a la vergüenza para salir ha denunciar y levantar su voz de protesta por los constantes abusos a los que se enfrenta a diario desde aquel fatídico 22 de octubre del año pasado.