Los exteriores de diversas comisarías de la capital continúan siendo utilizados como depósito de los vehículos intervenidos. Esta situación obstruye pistas y veredas y causa malestar entre conductores y peatones.
Durante un recorrido por las calles de Lima, un equipo de 24 Horas encontró autos destrozados, chocados, llenos de polvo y hasta chatarras. Un panorama que no debería existir luego de que el gobierno promulgara, hace más de tres meses, el decreto legislativo 1340 que prohíbe el uso de las instalaciones policiales como depósitos de vehículos intervenidos.
En la comisaría de Condevilla los vehículos están estacionados sobre lo que debería ser un área verde, lo que genera incomodidad en los vecinos. Incluso, como no hay más espacio, los mototaxis intervenidos han sido colocados sobre la tolva de las camionetas.
Mientras que en la comisaría de Lince, varios vehículos se encuentran abandonados en improvisados depósitos en los exteriores de esta dependencia policial y hasta ahora no pueden ser trasladados a un depósito de verdad.
Lamentablemente, ningún comisario de las dependencias policiales visitadas pudo pronunciarse sobre cómo se hará efectiva esta ley.
