Decenas de personas se concentraron en los principales distritos de la capital para celebrar el Día de la Canción Criolla y la fiesta de Halloween, muchos acudieron a estos eventos en sus autos particulares y por ello, la Policía Nacional realizó un operativo de alcoholemia para detectar a los malos e irresponsables conductores que manejaban bajos los efectos del alcohol.
Durante la madrugada fueron intervenidos 10 choferes que manejaban en total estado de ebriedad. Ellos acudieron a la comisaria y pagaron su dosaje etílico, además se les suspendió la licencia de conducir por seis meses, entre otras sanciones.
Si la falta es reiterativa o más grave, como haber ocasionado algún accidente, estos malos conductores recibirán sanciones penales que aplican hasta con tres años de pena privativa de la libertad.