El primer tren automático de la Línea 2 del Metro de Lima fue pintado de colores y convertidos en un burdo grafiti donde escribieron las siglas k25, SAC y hasta firmaron su delito. Vándalos, escudados tras el falso pretexto de arte urbano, violaron la propiedad privada y pintarrajearon las estructuras.
Hace tres días, el presidente del Consejo de Ministro, Fernando Zavala, y el ministro de Transportes y Comunicaciones presentaron el moderno tren que no necesitará de conductor.
Personal de seguridad del patio de taller de la Línea 2 del Metro de Lima se sorprendieron al enterarse de que a menos de siete días de la llegada de los trenes, la obra ya presenten estos daños.
A pesar que las obras de la Línea 2 del Metro de Lima están cercadas por planchas de metal, los vándalos se la ingeniaron para ingresar al recinto.
A través de un comunicado, la sociedad concesionaria del Metro de Lima aseguró que no se registraron mayores daños y que las pintas no perjudicarán la operatividad de los nuevos trenes. Junto a la policía, buscan sancionar a los autores de estas muestras que distan del verdadero arte urbano.
