En Villa el Salvador, a los alrededores de la línea uno del Metro de Lima, se puede encontrar basura, desmonte y sujetos de mal vivir, donde los transeúntes tienen que necesariamente pasar sobre la inmundicia para llegar a su destino.
Ningún ciudadano duda de la utilidad del tren como medio de transporte, sin embargo, el cuestionamiento viene por lo insalubre y descuido de las estructuras. Por ejemplo, en Villa el Salvador, muchos aprovechan este lugar como urinario público o como botadero de basura.
Los ambulantes, el tráfico y la basura no es todo, ya que las bases y paredes del tren sirven para satisfacer las necesidades de los transeúntes.