Durante 25 años, decenas de gatos se han adueñado del parque Kennedy de Miraflores, sin que nadie pueda hacer nada para evitar que su número se incremente.
Algunos están encantados con la presencia de estos felinos, sin embargo, otros se quejan por el mal olor y peligro de las excretas en los jardines.
Lo cual podría ser muy peligroso, y es que tanto los niños como adultos que tengan contacto con este ambiente podrían contraer toxoplasma.
Debido al inminente peligro para la salud pública, el gerente de Desarrollo Humano del municipio de Miraflores, dijo que el parque Kennedy no es lugar para los gatos.
No obstante, manifestó que la solución no es erradicarlos sino promover campañas de adopción. También dijo que se ha reforzado la seguridad en el parque, para intervenir a las personas que abandonan a sus gatos y multarlos con 3 mil 800 soles.
