Tras un intenso seguimiento por parte de la policía y las fuerzas armadas en la zona del Vraem, lograron incautar una gran cantidad de material logístico y pertrechos de sendero luminoso. Intervinieron 10 almacenes terroristas conocidos como “caletas” en las últimas dos semanas.
Según el general, Isidro Baella, estas “caletas” se encontraron un metro debajo de la superficie. Aparte de material explosivo, también se encontró una impresora, volante, un usb y una laptop. En estos dos habría información sobre los atentados planeados por Sendero Luminoso.
Lo que más llamó la atención, fueron los explosivos caseros que se encontraron, y es que con un bajo presupuesto y con materiales como botellas de yogurt, los miembros del grupo terrorista crearon potentes detonantes.