Agustín Panaifo Capinoa, ingresó a un cuarto alquilado de una casa ubicada en San Juan de Lurigancho, supuestamente llegó a visitar a un familiar, pero al parecer sus intenciones eran otras. Sacó un cuchillo de la cocina, lo escondió en sus bolsillos y se dirigió a otro cuarto donde una madre de familia limpiaba la habitación.
El presunto agresor, intentó ultrajarla, pero Sarita Monja se defendió con uñas y dientes. Antes de perder las fuerzas pidió a gritos auxilio. Su hijo de 14 años fue quien la escuchó y pidió ayuda a policías de un patrullero que pasaba por la zona en ese momento.
El agresor, fue trasladado a la comisaría de Diez de Octubre, donde las autoridades pidieron no perder de vista al sujeto, pues al parecer, sería el autor de más ataques cobardes contra mujeres indefensas.