Dicen que nunca es tarde para cumplir nuestros objetivos y sin duda alguna un gran ejemplo de ello es Virginia Hislop, una adulta mayor de 105 que, tras ocho largas décadas, finalmente logró culminar su maestría en los Estados Unidos.
La mujer estadounidense inició en el año 1941 su maestría en educación de la Escuela de Posgrado en Educación de Stanford (GSE), cuando estalló la Segunda Guerra Mundial. Su entonces novio, George Hislop, fue llamado a servir en la guerra, lo cual modificó sus planes académicos.
Virginia tuvo que abandonar sus estudios para casarse con su pareja y posteriormente contribuir al esfuerzo bélico y dedicarse a criar a su familia, sin embargo, a pesar de los años, ella nunca dejó de pensar en retomar sus estudios.
83 años después de abandonar sus estudios, el yerno de Virginia Hislop se comunicó con la Universidad de Stanford y descubrió que el programa ya no requería la tesis, logrando así recibirse tras varios años.
