Las tensiones en Oriente Medio han alcanzado un punto crítico con la sorpresiva decisión de Egipto de congelar su función como mediador entre Israel y las facciones palestinas, en respuesta al ataque israelí que resultó en la muerte de Saleh al-Arouri, considerado el número dos de la oficina política de Hamás, en las afueras de Beirut, Líbano.
Desde el inicio de la ofensiva israelí contra Hamás en octubre, la preocupación internacional se ha centrado en la posibilidad de que el conflicto se extienda hacia la frontera norte de Israel, y este reciente desarrollo agrega una nueva capa de complejidad a la situación regional.
NO VA MÁS
Egipto ha informado oficialmente a Israel sobre su decisión de suspender su papel como mediador en la búsqueda de un acuerdo para poner fin a la guerra.
La retirada de la mediación egipcia ha llevado a movimientos clave, como Hamás y Yihad Islámica, a anunciar la retirada de las negociaciones con Israel para alcanzar un cese de hostilidades.