Los osos polares están en peligro de extinción, tras la excesiva degradación de los glaciares, como consecuencia del cambio climático. En la bahía canadiense de Hudson, en pleno verano, los últimos pedazos de hielo son como confetis en el agua azul. Un oso toma el sol frente a las olas, lejos de la banquisa, y de sus presas, las focas.
Cada año, desde finales de junio, cuando el hielo desaparece, se ven obligados a vivir en situaciones alarmantes, sobre todo sin alimentación. Un ayuno cada vez más largo y peligroso para ellos. Los expertos advierten que se tiene que tomar prontas medidas, para evitar su desaparición.
“El cambio climático afecta su ambiente y esto genera que tenga dificultada para acceder a algunos recursos que son importantes para el desarrollo de su vida y de la especie”, indicó uno de los científicos que estudia la vida de los osos polares.
EXTINCIÓN
De acuerdo con las ultimas investigaciones, la extinción de estos animales, está más cerca de lo que se pronostica, puesto que gran cantidad de esta especie ha disminuido. Según un informe publicado en Nature Climate Change en 2020, de 1.200 osos polares en la década década de 1980 en el oeste de la bahía de Hudson, se ha pasado a unos 800 en la actualidad.
