De acuerdo con un nuevo estudio publicado en la revista Nature Climate Change, para el 2100 los osos polares podrían extinguirse, debido al cambio climático, ya que esta especie no podría conseguir alimento en tierra, e incluso las escenas cotidianas serían las que reflejan la práctica del canibalismo.
A pesar que los osos polares están acostumbrados a largos períodos de ayuno, necesitan la temporada de caza para reunir la energía que les permita reproducirse que, de no tenerla en el año 2040, es muy probable que tengan dificultades para reproducirse, desapareciendo de ciertas zonas.
La mayor amenaza para este animal es sin duda la destrucción de su hábitat que se ha visto seriamente afectada por la desglaciación.