Las cenizas expulsadas a causa de la erupción del volcán Taal, en Filipinas, provocaron un accidente que dejó como saldo una persona fallecida.
Por otro lado, al menos 30 mil personas abandonaron sus viviendas. En tanto, la provincia de Batangas fue declarada en estado de calamidad.
Además, la columna de cenizas se desplazó más de 100 kilómetros al norte, llegando hasta la capital filipina Manila. Esta situación provocó el cierre temporal del aeropuerto.