Las protestas continúan en Chile, país invadido de protestas durante más de 40 días por la convulsión social. Para repeler a los manifestantes, la Policía chilena cometió “graves violaciones de derechos humanos”, que incluyen uso excesivo de la fuerza, abusos en las detenciones y uso indiscriminado e indebido de armas y escopetas antidisturbios, así lo revela un informe de Human Rights Watch (HRW).
El documento elaborado por este organismo internacional, con sede en Nueva York, fue elaborado tras investigar y recibir cientos de denuncias que forman parte del día de miles de ciudadanos que se manifiestan en las calles por mejoras sociales. Hasta la fecha, son 23 los fallecidos por estas protestas.
José Miguel Vivanco, director de esta organización indicó que los abusos fueron diversos. "Hay centenares de denuncias como golpizas brutales, abusos sexuales, que no pueden quedar impunes, que deben ser sancionadas por las autoridades en Chile", expuso.
El Gobierno sureño se pronunció sobre el informe e indicó que se comprometerán a contribuir con el Ministerio Público para que estos delitos sean juzgados.
