Canadá. Los creadores del videojuego Fortnite, uno de los más populares del mundo, fueron acusados de diseñarlo para ser adictivo como la cocaína. Este juego lanzado por la estadounidense Epic Games en 2017, permite a hasta 100 jugadores, de forma individual o en equipos, pelear en un campo de batalla virtual por convertirse en el último en pie.
Los padres de dos niños argumentan en la demanda que provoca producción de dopamina, un neurotransmisor asociado a la gratificación con lo cual generaría dependencia. "Muchos no comen ni se duchan, y dejan de socializar, dice el documento, que menciona también a jugadores que han sido forzados a buscar tratamiento ante su adicción.
Fortnite es jugado por unas 250 millones de personas en todo el mundo.