De seguro usted es una de las tantas personas obsesionadas con los “selfies” y estos terminan en las redes sociales, y esta comprobado que para algunos recibir muchos “me gusta” es sinónimo de popularidad y éxito, pero un estudio de la Universidad estatal de Washington apunta en otra dirección.
Según sus conclusiones, las personas que publican muchas “selfies”, son percibidas como menos agradables, menos exitosas, más inseguras e incluso, poco dispuestas a menos experiencias.
Los autores de la investigación afirman que las mismas fotografías, pero posadas, es decir tomadas por alguien más, son capaces de trasmitir justamente lo contrario. En muchos casos, el tomarse “selfies” en exceso se puede llegar a convertirse en una obsesión de las personas por tomarse la foto perfecta.
Aunque no se debe generalizar, los expertos advierten que exponer la vida personal también podría hablar de algunos temas psicológicos como baja autoestima e inseguridad, lo cual lleva a esas personas a buscar aprobación y aceptación de los demás.
Cabe indicar que compartir viajes o éxitos no hacen daño a nadie, el problema, según especialistas, es cuando se convierte en una obsesión.