Hace pocos días se conoció sobre el colapso del puente Morandi, ubicado en la ciudad italiana de Génova, el cual ha dejado 42 fallecidos y varios heridos, sin embargo, no es la única tragedia de esta categoría que el mundo ha presenciado.
Meses atrás, pero en Cuba, las torrenciales lluvias registradas en el país caribeño provocaron el desplome de una vía que cruzaba el río Zaza. Al momento de la caída, dos personas lograron salvarse cuando transitaban por la zona.
Por su parte, Estados Unidos, tampoco ha sido ajeno a esta clase de hechos. Un puente en Florida que tan solo tenía una semana de haberse inaugurado colapsó el pasado mes de marzo. La tragedia dejó seis fallecidos y varias unidades aplastadas.
Sin embargo, no sería la única estructura vial de ese país que sería destruida, pues en 1940, la conexión de Tacoma Narrows cayó tras soportar una fuertes vientos.
Mientras tanto, en Colombia, la caída de una pasarela que estaba en construcción dejó como saldo a 10 obreros muertos. Tiempo después lo que quedaba de la construcción sería demolida.
Finalmente Brasil se vería conmocionada en el 2014 tras el desplome de una vía ubicada en Belo Horizonte. Dos personas fallecieron en el lugar.
