En Japón, en un parque de diversiones en la ciudad de Osaka, que se encontraba repleto de turistas durante las festividades de la "Semana Dorada" de Japón, el juego Flying Dinosaur se quedó a mitad del recorrido, tras fallar el dispositivo de regulación en los rieles y los pasajeros quedaron inclinados a unos 30 metros de altura.
La montaña rusa se detuvo a mitad del recorrido y los carros se detuvieron dejando a 64 personas suspendidas.
El rescate tomo tiempo ya que la última persona sacada tuvo que esperar dos horas para bajarse de la atracción.