El exlíder militar bosnio croata, Slobodan Praljak perdió la vida tras beber veneno de una botella pequeña en el Tribunal Penal Internacional para la Antigua yugoslavia (TPIY).
Todo se desarrollaba con normalidad, cuando de pronto el exgeneral alzó la voz y bebió del frasco que sacó de un bolsillo. La sesión tuvo que suspenderse en medio de gran confusión.
Praljak fue trasladado a un hospital de La Haya, donde falleció horas después. En tanto, las autoridades han abierto una investigación para saber cómo llegó hasta sus manos el cianuro.
Cabe señalar que estaba acusado de asesinato, maltrato de civiles, violaciones, apropiaciones de bienes y, específicamente, de ordenar la destrucción del puente de Mostar en 1993, que causó un daño desproporcionado a la población musulmana.