La fiesta de los muertos es ampliamente conocida en el mundo entero, pero nadie sabe de esto más que los mexicanos. En el país azteca, miles de personas se visten de una colorida aunque espantosa calavera para conmemorar a sus seres queridos que han partido.
En Nicaragua la celebración es similar. Miles de personas recorren las calles vestidas de diablillos, payasos y diferentes personajes ligados al terror. Con estas prendas recorren las calles de la ciudad que, según la creencia popular tiene por finalidad espantar a los malos espíritus y las malas vibras.
En Brasil, la cultura carioca ha logrado fusionar la popular fiesta de Halloween con una tradición cultural originaria.