Según primeros informes, al menos tres personas han muerto y 60 resultaron heridas a causa del terremoto de 6.5 grados de magnitud que sacudió hoy la isla de Leyte, de unos 65 mil habitantes, ubicada en la región central de Filipinas. Cientos de personas permanecen en las calles por temor a las réplicas.
Las operaciones de rescate y asistencia a los damnificados de Leyte están en marcha, pero se han encontrado con la entrada de la noche. Se cree que decenas de personas están sepultadas debajo de sus viviendas. Lo que podría aumentar el número de víctimas fatales.
El terremoto ha causado cortes de luz, teléfono y agua no solo en Leyte, centro del seísmo, sino también en las vecinas islas de Samar, Bohol, Panay, Negros y Cebú. Los aeropuertos de Leyte no han sufrido daños, según las autoridades de la aviación civil, lo que permitirá la llegada de asistencia a la isla.
Filipinas se asienta sobre el llamado "Anillo de Fuego del Pacifico", un área de gran actividad sísmica y volcánica que registra unos 7 mil temblores al año, la mayoría moderados.
