Un hombre en China salvó de milagro, tras ser protagonista de un terrible accidente. Los hechos se suscitaron cuando un vehículo que venía en retroceso lo embistió y lo hizo caer estrepitosamente a la parte baja de un estacionamiento, segundos después el mismo automóvil, que lo empujo, se precipita y por poco cae sobre la víctima.
Este ciudadano Chino, sobrevivió a esta estremecedora experiencia, ya que tan solo escasos centímetros lo libraron de una muerte segura.
Como dato anecdótico hay que tener en cuenta que según las leyes en China, el que ayude a algún accidentado deberá pagar también los daños que sufre. He allí el principal motivo que hace ver a los chinos en ocasiones como personas inmisericordes. En consecuencia, sin ninguna ley que señale lo contrario, siempre verán como mejor opción dejar morir a alguien en el asfalto que ayudarlo.
