El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, obligó a Michel Flynn para que renuncie a su cargo como asesor de seguridad nacional. Además le habría pedido abandonar la Casa Blanca por unas conversaciones con el Kremlin, las cuales posiblemente no llegó a informar.
“La cuestión es si se informó o no adecuadamente al vicepresidente o si fue honesto con él. Es una cuestión sencilla. El presidente ya no le tiene más confianza y pidió que renunciara”, mencionó el portavoz de la residencia presidencial, Sean Spicer.
El hecho se produce luego que en el pasado mes de diciembre, Flynn tuviera una serie de conversaciones con el embajador de Rusia en Washignton, Sergey Kislyak, sobre las sanciones estadounidenses que impondrá al gobierno ruso. Tras su salida, la jefatura ha colocado en el cargo a Joseph Kellogg, una general retirado.
