Nueve marinos chilenos han sido involucrados en un sonado caso de espionaje a sus compañeras en la fragata Almirante Lynch. Los uniformados son acusados de instalar dispositivos de grabación para espiar a sus compañeras en la intimidad de sus dormitorios.
Las imágenes muestran cómo fueron instaladas las cámaras en los dormitorios del personal femenino con el único y simple fin de observarlas, para luego divulgar lo grabado vía Whatsapp y otras redes sociales.
Las víctimas fueron seis mujeres con grados que iban desde marinero primero hasta sargento segundo, quienes fueron grabadas mientras estaban en ropa interior o desnudas en sus habitaciones.