Los rebeldes decidieron deponer sus armas en la ciudad de Alepo en Siria. Esto tras llegar a un consenso para la evacuación de civiles en esa zona, donde el predominante ahora son las interminables filas de personas que se desplazan por las calles.
A lo largo de las calles, se movilizan con todas sus pertenencias y lo hacen acompañados de sus parientes, hay niños y hasta bebes. Sin embargo, las escenas contrastan con lo dicho por la Organización de las Naciones Unidas, que denuncian la ejecución de civiles a manos del ejército gubernamental.
Por otro lado, en la ciudad de Palmira, el autodenominado Estado Islámico hace sentir su presencia y fuerza avanzando por distintos pueblos. En un video los observamos en las inmediaciones de una base rusa, tomando todo el armamento que dejaron los soldados.
Ya es conocido que el grupo terrorista se hizo con el control de esa localidad hace unos días, tras ser expulsado en marzo último.