Epicenter, es la compañía que ha causado controversia en Suecia por colocarle a sus empleados chips en la mano, para que puedan abrir puertas del edificio, utilizar las fotocopiadoras, pagar servicios con solo el movimiento de la mano.
Este chip es del tamaño de un grano de arroz, mide unos doce milímetros además incluye un código de identificación y se inyecta con una jeringa.
La idea de la compañía sueca es que gran parte de sus 700 trabajadores se animen a implantarse el chip.