Según la cadena RT, los rebeldes sirios planean realizar un ataque contra Israel desde el territorio controlado por las fuerzas de Al Assad. Al parecer el grupo opositor intentaría hacer uso de armas químicas para generar una provocación a gran escala.
Esta advertencia surge tras la propuesta del canciller ruso Serguéi Lavrov, de poner su arsenal de armas químicas bajo el control internacional para su posterior destrucción, a fin de prevenir un posible ataque militar contra el país árabe.
Moscú instó a las autoridades sirias a unirse a la Organización para la Prohibición de Armas Químicas. La oferta fue presentada al ministro de Relaciones Exteriores sirio, Walid al Muallem, quien se reunió con Lavrov en Moscú este lunes.
"No sabemos si Siria aceptará la oferta, pero si la imposición de un control internacional sobre las armas químicas almacenadas en el país puede ayudar a evitar los ataques militares, inmediatamente vamos a empezar a trabajar con Damasco", dijo Lavrov.
Tras la reunión se supo que el Gobierno sirio saludó la iniciativa de Moscú y estaría pensando aceptarla "basada en la preocupación del Gobierno sirio por la vida de nuestro pueblo y la seguridad de nuestro país", agregó Muallem.