En Estados Unidos, una mujer originaria del estado de Texas celebró su reciente divorcio con una fiesta por todo lo alto. Kimberly Santleben-Stiteler, de 43 años, puso fin a 14 años de matrimonio haciendo estallar y volando por los aires su vestido de novia.
Para esta celebración la mujer utilizó nueve kilogramos de Tannerite, una sustancia altamente explosiva de uso recreativo con la que roció su vestido blanco y listo.
Cabe señalar que la explosión del traje nupcial, según fuentes policiales, se escuchó a 25 kilómetros de distancia, lo que alarmó a los vecinos.