Cuando Patrick Schwarzenegger era un niño, estaba tan obsesionado con estar en las películas de su padre que tenían que apartarlo de las cámaras. El joven actor cuenta que durante días, dormía en los set de rodaje de “Terminator” o “Batman & Robin” y pasaba las horas comiendo dulces del catering o conduciendo un carrito de golf alrededor de los estudios para estar cerca de su padre y de lo que más le apasionaba el mundo del cine.
A pesar de la transición de la familia de Hollywood a Sacramento, cuando Arnold se convirtió en gobernador, el joven Schwarzenegger se aferró al negocio del cine. Ahora, a los 24 años, trata de recuperar parte de la alegría de la infancia embarcándose en su propia carrera como actor.
En su primer papel protagonista en el romance adolescente «Amor a medianoche», interpreta a un deportista estrella del colegio de secundaria que se enamora de una aspirante a compositora (Bella Thorne) que padece una rara enfermedad que la obliga a evitar la exposición a rayos ultravioleta.