Este nuevo ‘deporte’ es tan popular que se realizan competencias en diversas partes del mundo. Para practicarlo solo se necesitan dos personas dispuestas a bofetearse en el rostro y temple, mucho temple para no caer de un golpe.
El torneo consiste en que ambas personas se colocan una frente a la otra y, a la señal de un árbitro cada uno de los retadores tiene un torno para poder golpear en la cara a su contrincante. El deporte solo finaliza cuando uno de ellos cae o se da por vencido.
Este tipo de prácticas se realiza en gimnasios, club nocturnos y hasta en la propia calle. Lo practican tanto hombres como mujeres.