La Isla da Queimada Grande, o también "la isla de las cobras", está ubicada en la costa del estado de Sao Paulo en Brasil y es habitada por una de las especies más peligrosas y letales del planeta: la serpiente de la Isla Quemada.
La Marina brasileña está a cargo de cuidar la isla y prohíbe el ingreso de las personas debido a la peligrosidad que existe en el sitio, y solo se permite entrar a algunos científicos con permisos especiales.
Se estima que hay una serpiente por metro cuadrado de la isla lo que nos llevaría a la cifra de 430.000 reptiles venenosos.