Asilo de Heredia en Brasil desata críticas: “Fue una fuga anunciada y pactada”
El abogado James Rodríguez asegura que el salvoconducto fue negociado previamente. Acusan al gobierno de favorecer la impunidad en un caso emblemático de corrupción.
El abogado James Rodríguez asegura que el salvoconducto fue negociado previamente. Acusan al gobierno de favorecer la impunidad en un caso emblemático de corrupción.
La exprimera dama Nadine Heredia, recientemente condenada a 15 años de prisión por lavado de activos, abandonó el país rumbo a Brasil tras recibir asilo diplomático por decisión del presidente Luiz Inácio Lula da Silva. Su salida fue posible gracias al salvoconducto que otorgó el gobierno peruano, encabezado por la presidenta Dina Boluarte y el canciller Elmer Schialer. En el programa ‘2025 en 24 Horas’, el abogado penalista James Rodríguez cuestionó duramente la decisión: “Otorgarle el salvoconducto a una persona que se sustrae de la justicia no es más que darle una puñalada a los jueces que encontraron responsabilidad en una expareja presidencial”.
Durante el espacio conducido por la periodista Tatiana Alemán en Panamericana Televisión, se debatieron los efectos legales y políticos de esta acción. Rodríguez advirtió que “ya no hubiera habido un solo asilado político en Brasil, sino dos: el señor Ollanta Humala y la señora Nadine Heredia”. A su juicio, el gobierno debió evitar facilitar la fuga y respaldar la sentencia judicial: “Este es un pésimo precedente en la justicia del país”.
Un salvoconducto polémico: ¿impunidad disfrazada de asilo político?
El abogado constitucionalista Luciano López también alertó sobre la dificultad de una futura extradición: “El tratado bilateral entre Perú y Brasil prohíbe repatriar refugiados políticos”. Sobre ese punto, Rodríguez fue tajante: “Brasil no entrega ni a sus connacionales ni a refugiados, salvo en casos de narcotráfico, que no es el caso”. Ambos expertos coincidieron en que el Ejecutivo actuó con rapidez inusual y sin considerar los riesgos procesales, facilitando lo que llamaron “una crónica de una fuga anunciada”.
Además, se cuestionó el papel del canciller Schialer, quien había asegurado que la justicia podía solicitar una extradición. “Le ha faltado la verdad al país”, dijo López, recordando que la entrega de un asilado político por parte de Brasil es prácticamente inviable. El nuevo abogado de Heredia en Brasil, Marco Aurelio de Carvalho —estrechamente vinculado a Lula—, sostuvo que “la propia presidenta del Perú reconoció que había requisitos muy fuertes y comprobables para conceder el salvoconducto”. Según afirmó: “Fue una decisión feliz del presidente Lula que debemos aplaudir”.