Nuevamente, la Policía Nacional vuelve a estar en el ojo de la tormenta. Hoy otros 3 agentes policiales, de la comisaría Apolo, fueron detenidos por sus propios compañeros tras extorsionar a un intervenido con más de 2 mil soles para dejarlo en libertad.
La ruta de la coima inició el 22 de marzo de este año en plena avenida Javier Prado, donde los suboficiales Raffo Romero y Cesar Aguilar detuvieron a un conductor que realizaba maniobras peligrosas, tras llevarlo a la comisaría Apolo inició la extorsión.
Según información fiscal, estos dos suboficiales no operaban solos, ya que eran comandados por el recién egresado alférez Luis Armando Guerra Quispe, quien habría encomendado a sus subalternos trasladar al intervenido hasta un cajero de Lince para retirar el dinero de la coima.
Pese a sus esfuerzos el intervenido no logró retirar el dinero por lo que decidieron realizar una transferencia bancaria a un presunto cuarto integrante de esta banda criminal. Se trataría del civil Richard Llontop Mamani, quien sería íntimo amigo de uno de estos suboficiales.
CÁMARAS DE SEGURIDAD REGISTRARON SU ACCIONAR
Una vez con el dinero de la coima en sus cuentas, los sujetos borraron todo rastro de la presencia del intervenido en la comisaría. Pero, todos los movimientos de los policías quedaron grabados en las cámaras de seguridad que fallidamente intentaron eliminar.