Los militares ingresaron al corazón de las protestas, cerca de 300 militares se trasladaron a Puno y desfilaron por las principales calles y avenidas de esta zona del sur. Algunos pobladores sorprendidos grabaron con sus celulares el paso del contingente de las Fuerzas Armadas.
¿Será la militarización la nueva estrategia del Gobierno para frenar la violencia en el país? Desde el pasado 4 de enero, día del reinicio de las protestas, Puno se convirtió en el escenario de enfrentamientos sin cuartel entre manifestantes y miembros de la Policía Nacional, incluso un agente murió calcinado.
La quema de comisarías, el ataque a las sedes del Poder Judicial y Fiscalía en Juliaca y hasta daños a cajas municipales ha llevado al Ejecutivo a enviar refuerzos militares para que apoyen a la PNP que ha quedado reducida ante la ola de violencia.
La noticia no cayó nada bien para los manifestantes, aunque durante las primeras horas la presencia militar no ha alterado el desarrollo de las protestas, según el gobernador de Puno Richard Hancco.
