La Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (Sunass) a través de su gerente de Usuarios, Carlos Benites, sostuvo que el agua ya no puede ser parte de los carnavales, debido a su escasez mundial.
Benites advirtió en una radio local que una persona puede llegar a desperdiciar 40 litros de agua por cada 10 baldes utilizados, y si a esto se le multiplica por cuatro domingos y mil personas jugando, se derrochan 800 mil litros de agua en promedio.
“Esto es acto de responsabilidad. Los carnavales deben jugarse con otros elementos porque el agua ya no puede ser parte de este juego”, subrayó el representante de la Sunass.
Además expresó que los carnavales han pasado de ser una fiesta de verano a un problema, en el cual la gente no puede “darse el lujo” de desperdiciar el líquido elemento en una ciudad como es Lima, donde el recurso se vuelve escaso.
El gerente de la Sunas también indicó que en el mes de febrero el consumo de agua se incrementa en más de un millón de metros cúbicos, en relación a enero y marzo.