El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se refirió en un comunicado oficial al asesinato de tres policías blancos en la localidad de Baton Rouge, en Luisiana, y afirmó que “no hay justificación posible para la violencia contra los agentes de la ley”.
"Nada puede justificar la violencia contra la policía. Condeno en los términos más fuertes el ataque contra los agentes de la ley en Baton Rouge", sostuvo Obama, quien admitió que aún se desconocen los detalles de los homicidios.
"Por segunda vez en dos semanas, los agentes de policía que ponen sus vidas en riesgo cada día por nosotros, estaban haciendo su trabajo cuando fueron asesinados en un ataque cobarde", agregó.
Cabe señalar que la policía sospecha que el ataque de hoy, perpetrado como una emboscada, fue llevado a cabo por tres individuos, uno de los cuales murió en el tiroteo, y ha desplegado una intensa búsqueda por toda la ciudad para dar con el paradero de los otros dos.
El ataque se produce en un contexto fuerte de tensiones raciales en la capital de Luisiana, eje de numerosas manifestaciones de protesta contra la violencia policial en las últimas semanas.
