En una pequeña ciudad ubicada al noreste de Egipto, nació un bebé con una extraña condición médica que, aparentemente, no lo dejará vivir por mucho tiempo. Y es que el menor solo tiene un ojo en medio de la frente, lo que parece ser un caso de ciclopía.
El ojo único y la falta de nariz es el resultado de una malformación que puede haber sido causada por exposición a la radiación en el útero. La mayoría de los bebés con este trastorno no sobreviven ya que a menudo tienen otras complicaciones, incluyendo corazones gravemente malformados.
De acuerdo con informes del sitio web slaati.com, los médicos piensan que la deformidad podría ser el resultado de una combinación de medicamentos tomados por la madre o por la exposición a la radiación.
Se sabe que este extraño mal suele ocurrir cuatro veces en 1.000 nacimientos, pero en la mayoría de casos los embarazos se complican antes del nacimiento.
