Emilio Palacio, quien fuera columnista del diario El Universo de Ecuador, y hace pocos días condenado a prisión, además de ser obligado por sentencia judicial a pagar millones de dólares por una demanda interpuesta por el presidente Rafael Correa, pidió el miércoles asilo político en los Estados Unidos (EE UU).
Palacio presentó la solicitud de asilo en la ciudad Miami, argumentando que es víctima de persecución en su país debido a sus opiniones críticas sobre el Gobierno de Correa, y él es un periodista independiente.
“Estoy Convencido de que el caso está fundamentado”, expresó Palacio en entrevista telefónica con medios internacionales, y dijo que confía en que las autoridades de los EE UU le concederán el asilo.
Además dijo estar “satisfecho”, tras salir de una audiencia de más de cuatro horas en la que le presentó su caso a las autoridades de inmigración.
El periodista se desempeñaba como editor de la sección de opinión del Universo diario editado en la ciudad de Guayaquil cuando fue demandado por Correa, junto con los tres dueños del periódico. Cabe señalar que todos fueron condenados a pagar 42 millones de dólares y a cumplir tres años de cárcel por la columna de Palacio titulada “No a las mentiras”, publicada en febrero de 2011.
En el artículo se refería al mandatario Rafael Correa como “el Dictador” y lo acusaba de “haber ordenado fuego a discreción y sin previo aviso contra un hospital lleno de civiles y gente inocente”, el 30 de septiembre de 2010 durante una sublevación policial, que tuvo eco en todo Sudamérica, y a una reunión de los integrantes de Unasur.
Por su parte, el cónsul de Ecuador en Miami, Eduardo Rivadeneira, aseguró que Palacio no es un “perseguido político” y puede volver a su país cuando quiera. “El señor Emilio Palacio no es un perseguido político como él afirma. El Sr. Palacio es libre de volver con su familia a su país hoy, mañana o cuando lo desee”, subrayó Rivadeneria en un comunicado.
Según el diplomático Palacio “no tiene ninguna necesidad de vivir fuera de su país, puesto que es bienvenido de volver a su patria y continuar ejerciendo su rol en el ámbito del periodismo cuando lo desee”.
Esta solicitud se produce un día después de que un juzgado ecuatoriano condenara a otros dos periodistas al pago de un millón de dólares cada uno en concepto de indemnización al mandatario por su libro El Gran Hermano, que denuncia la presunta firma de contratos entre el Estado y el hermano del presidente, Fabricio Correa.
