Personal de la Marina de Guerra del Perú y de la alcaldía de Barranca, tras sobrevolar las costas de la provincia, informaron que el petróleo, vertido hace una semana en el mar de Ventanilla, afortunadamente no ha llegado a la localidad.
El anuncio dio un respiro a vecinos, comerciantes y sobre todo a los pescadores quienes temen perder su fuente de ingreso, como sucedió con sus compañeros de Lima, que están sin trabajo y no ven una solución próxima a su situación.
Municipio elaboró estrategias
Por otro lado, el burgomaestre Ricardo Zender, informó que estarán siempre vigilantes hasta que esta situación se supere, y que junto a especialistas han elaborado importantes estrategias si la marea negra llega a las costas de localidad.