Sin lugar a dudas fue un partidazo. Samuel Umtiti de cabeza dio el pase a los galos a su segunda final, el partido ante Bélgica, jugado en el estadio Krestovski de San Petersburgo, fue intenso desde el inicio hasta el final.
Francia se impuso 1-0 a Bélgica con gol anotado casi al inicio del segundo tiempo. Tras 20 años, los galos están a muy poco de levantar nuevamente la Copa del Mundo.
El tanto francés no hizo sino aumentar la intensidad del encuentro. La selección de Bélgica se lanzó en forma desbocada en busca del empate. Mientras los galos se organizaron mejor atrás y apostaron por contraataques que les permitiera ampliar el marcador.
Francia chocará el domingo por el título en Moscú con Inglaterra o Croacia, que se medían en la otra semifinal, este miércoles.